domingo, 10 de agosto de 2008

El Ser planetario

{10/08/08} Las grandes calamidades que acompañan las épocas de transición no son un “castigo de los cielos” como muchos creen todavía. Las manchas o explosiones solares, el fenómeno de “El Niño” y otros semejantes, así como la erupción de volcanes, forman parte del ciclo natural del propio sistema planetario. Lo que se vio en los años del cambio fue solamente el resultado de la acción desbalanceada del hombre, sumada a los eventos naturales - que serían más fáciles de enfrentar si el hombre estuviese trabajando al unísono con los demás y con el planeta.

El aumento gradual de la temperatura, el deshielo de las capas polares, el recrudecimiento de ciclones y huracanes, la disminución del agua potable y el crecimiento de las áreas de desierto en el planeta pueden ser medidos y comprobados por la forma en que usamos el medio ambiente a nuestro alrededor. En la época ya existía toda la información tecnológica necesaria para el cultivo sin destrucción, informaciones sobre el manejo sustentable en la agricultura, ganadería, sistemas constructivos viables para el desarrollo sin destrucción y desequilibrio. Pero el egoísmo y la ambición imperaban en los corazones, en detrimento de la vida humana y planetaria. Sí, pocos admitían que el Planeta pudiese ser también un Ser Espiritual, un servidor. Un ser vivo que ahora pedía para ser liberado. ¿Liberado de quien? ¡Del juego humano! {Crónica 120}

No hay comentarios.: