domingo, 16 de diciembre de 2012

Todas las gracias

[18/11/2018] En este final de año publicamos un balance de nuestro presente. Regístrese que el planeta entró en la soñada Era Dorada y hoy estamos recordando toda esa maravilla. En poco más de cinco años ordenamos los gobiernos en un gobierno mundial, fortalecimos el consejo planetario promoviendo la armonía entre los pueblos, derribamos las barrearas artificiales entre las naciones, conquistamos un lenguaje común, una sola moneda y los principios de la educación universal alcanzaron a todos. Nuestro sistema de ocupación territorial, de desarrollo, actividades industriales, agrícolas y comerciales se desenvuelven en perfecta sustentabilidad y la filosofía de vida volteada hacia el ser, amplía la visión cósmica de los ciudadanos y el autoconocimiento. 

El actual respeto hacia las creencias facilita la búsqueda de una identidad espiritual. Las ciencias atienden los anhelos creativos de los pueblos, y la tecnología trabaja para liberar y expandir horizontes de los seres humanos. Tenemos contactos con pueblos de otros planetas, ampliamos nuestras relaciones cósmicas, y por fin contabilizamos 5 años de paz verdadera, desde la última guerra. Son muchas conquistas en poco tiempo. Y las condiciones planetarias muestran que podemos mucho más. 

La naturaleza nos brindó su perfecta lección de armonía y fuimos sensibles a entenderla. Ella ahora ocupa su legítimo lugar en los derechos universales del planeta y más que protegerla por ley, estamos propensos a aprender con ella antes de querer dominarla. 

Los ciudadanos cultivan el saber, las artes y el placer como nunca y conseguimos revelar la verdadera identidad de la hermandad entre los hombres. Todas las gracias serán dadas en este final de año en agradecimiento del ser humano al Padre Universal que nos protege. [Registro 137]

Lo cotidiano de la inseguridad

{25/11/2012} La violencia que aún encontraba espacio entre nosotros, era constantemente divulgada y “actualizada” a través de los medios de comunicación. Por ser cotidiana en países en guerra, era sólo seleccionar el “dial” de nuestra percepción para lo que pensábamos era la “violencia distante de aquellos que están siempre luchando entre si”. Estaba también la opción de sintonizar la violencia local, considerada chocante e injustificada en tanto sucedía en nuestros “tiempos de paz”. ¿De dónde venía la violencia y qué hacer para que cesara? 

Presente desde la formación del planeta, formó parte de la eclosión de la vida en fantásticas explosiones volcánicas, inundaciones, maremotos, temblores y truenos. Nos acostumbramos a llamar a ese barullo “violencia de la naturaleza”. Y esa violencia natural se dio en la lucha por el nacimiento, en la batalla por la supervivencia, por la construcción de abrigos, por la expansión humana en el planeta. Y sentimos el poder del miedo, del comer o ser comido, del hambre, del rapto, de la agresión – corriendo, unos detrás de comida, otros de proteger a la cría -las hembras- o de asegurar la posesión de bienes, del territorio conquistado - nuestra prehistoria no es muy delicada a los ojos del homo sapiens actual. 

Mas el hombre se sofisticó, creó un distanciamiento crítico entre el pasado y el presente, creyendo que ya había conquistado medios de crecer sin agredir. Lo que restó fue una tenaz búsqueda de seguridad, que acabó por aprisionarlo en el miedo irracional, más en el sutil descreimiento que vacía el alma. {Crónica 008}

Transformación continua

[04/11/2018] Cuando comenzaron a investigar sobre cómo eliminar de la naturaleza los depósitos de plásticos no degradables, un fenómeno químico-físico fue conquistado: la materia plástica estaba juntándose, aglutinándose espontáneamente sobre la tierra, dentro de los mares y hasta en el aire: bolsas de plástico aleteando, tendían a juntarse después de ser pulverizadas con una química innovadora. 

Esa fórmula, premiada, está siendo utilizada para purificar gigantescas áreas donde antes había residuos para ser liberadas de todas las impurezas y recuperadas para otros destinos. El reaprovechamiento de todo lo que es producido industrialmente, llegó a un grado de excelencia máximo y poco a poco viene siendo abandonada la idea de reciclar: todo lo que se hace para ser usado, cuando es descartado es automáticamente transformado en continuo proceso de reutilización. 

Todos saben que ya habían sido inventados zapatos vegetales al comienzo de la onda verde en el planeta con la finalidad de evitar el uso de piel de animales y subproductos del petróleo. Ahora los modelados son hechos a medida, colocándose los pies dentro de un scanner una vez elegido el modelo, el zapato queda pronto en 10 minutos conforme al pie de cada uno, pudiendo ser aplicadas las modificaciones sugeridas por los promotores de salud para mejorar la pisada. [Registro 136]

La humanidad a prueba

{11/11/2012} Los gobiernos no acataron la orden divina de reconocer y subordinarse al orden cósmico existente en el universo, previniendo el caos que seguiría. Los gobernantes nunca revelaron sus secretos sobre los desmanes del poder económico y las órdenes negras ocultas que manejaban la política. La relación social humana estaba comprometida por el ocultismo, por las sombras. Era preciso mucho esfuerzo para mantenerse despierto y consciente. 

Muchos grupos y organizaciones surgieron para protestar contra la usura y la corrupción. Ondas de desempleo se sucedían y los países hacían mucho esfuerzo para no naufragar. Había un peligro constante de rebelión en Oriente. Muchas previsiones decían que una gran guerra podría comenzar en aquella región. Sectarismos místicos eran como pólvora: explosiones en cada esquina. 

¿Por qué no se detenían? ¿Qué cuentas tenían para ajustar aún entre hermanos? El desequilibrio económico mundial afectaba una y otra nación, sin alcanzar una solución. Los países emergentes, mientras tanto, hacían de todo para conquistar nuevas posiciones en el escenario mundial. Había una necesidad de crecer, la urgencia de perfeccionamiento, un gran desafío de acompañar una tecnología que se convertía en el único recurso para aquel que aspiraba competir y vencer a los demás. El ser humano fue degradado al extremo. Pero cuestionaba esos valores o la falta de ellos, como nunca. La palabra delirio pasó a ser común en el pensamiento del hombre contemporáneo. Él sabía que su humanidad estaba siendo probada y al borde del abismo. {Crónica 009}