Universo abierto

{03/10/2010} En 2010 el hombre vio revelados algunos misterios del Universo. Descubrió la posibilidad de vida fuera del sistema Solar y profundizó en el conocimiento del sistema planetario que lo circundaba. Amplió su visión de la inmensidad y del microcosmos, abriéndose a la maravillosa experiencia divina y planetaria en la que vivía. Verificó internamente la existencia del Gran Arquitecto del Universo como el Centro de todo, el Único Centro, y se precipitó a la expansión de la consciencia, jamás experimentada antes.

Sus hallazgos incluyeron los sistemas de vida animal, vegetal, mineral, los movimientos de los vientos y de las mareas, y la confirmación – una vez más - de que una pequeña hoja caída de un árbol sirve realmente al balance de la vida en el planeta. Confirmó también el poder curativo de la luz y la necesidad de equilibrio entre la mente y las emociones como forma de prevención de desarmonías y guerras.

Los servicios de prevención se fortalecieron, los movimientos sociales de cuidados a la vida planetaria y humana se redimensionaron, y las sociedades espirituales comenzaron a sentir el peso de la responsabilidad por haber explotado a las personas por tanto tiempo, sin haberles entregado la Verdad para la liberación del Espíritu. Grandes terremotos sacudieron las estructuras, tanto del mundo físico como de las instituciones religiosas. Y la falsedad de los que se decían profetas fue revelada, derrumbando mitos. Y muchos abandonaron el misticismo para buscar la práctica de comunión interna con Dios. {Crónica 064}